Calvary Chapel Guanajuato - 36200 Guanajuato

Calvary Chapel Guanajuato abre sus puertas en 2014 con el llamado de Dios al Pastor Héctor Velarde y su familia para comenzar esta obra de su iglesia en la capital del estado.

Durante cinco años, el Pastor Héctor Velarde estuvo al frente de la iglesia pastoreando con el apoyo de su familia, sin embargo a principios de 2019 recibe el llamado de Dios para regresar a su país y pastorear Calvary New Spring en San Antonio, Texas.

Yo soy oriundo de la ciudad de Torreón Coahuila, a los 11 años hice la oración de fe en Cristo como mi Señor y Salvador, pero a los 14 años me desentendí de la iglesia, viví sin buscar a Cristo y a los 22 años regresé a la congregación por la invitació de un amigo.

Me mudé al estado de Guanajuato en el año de 2016 enamorado y con la confirmación de Dios para casarme con una extraordinaria mujer de Dios, Gaby Diaz. A principios del 2017 nos comenzamos a congregar en Calvary Chapel Guanajuato, donde mi esposa y yo comenzamos a servir, sin imaginar lo que Dios tenía preparado.

En el 2019 al mismo tiempo que el Pastor Héctor pensaba en obedecer y regresar a San Antonio, en mi corazón se hacía mas fuerte el llamado para servir a Dios como Pastor, lo puse en las manos de Dios, hablé con mi esposa y decidimos dar ese paso de fe y obediencia en Dios.

En ese mismo año 2019, Gaby y yo estabamos en espera de nuestra hija Ana Olivia, que nació a finales de mayo. En el parto se dan cuenta los doctores que mi esposa tenía un tumor. El resultado fue cáncer agresivo y en una etapa muy avanzada.

En ese mes, también Pastor Héctor me confirma que el Señor contestó por medio de Su Palabra mi llamado a pastorear Calvary Chapel Guanajuato y en octubre de 2019 soy nombrado como Pastor de la iglesia en Guanajuato. Mi esposa Gaby que había aceptado caminar y servir a mi lado no lo pudó hacer, Dios tenía un llamado mas hermoso para ella, la llamó a su presencia en enero del año 2020.

Hoy sirvo como Pastor en esta iglesia en compañia de mi hija Ana Olivia, confiando plenamente en un Dios bueno, un Dios que existe, en su Hijo Jesucristo quien es real, que habitó entre nosotros, dio su vida y pagó nuestros pecados en la cruz del Calvario.

También creyendo en su Espíritu Santo que nos capacita, nos enseña, nos consuela y está en nosotros. Aquí estoy para servirles porque la bondad, el amor, la fidelidad de Dios, me sostiene para seguir obediente a su llamado y continuar la buena obra que Él ha comenzado.

"Hallé a David mi siervo; Lo ungí con mi santa unción" 

Salmo 89:20