Colegio Mexicano Japonés S.C. - 11550 Ciudad de México

Para este objetivo se establecieron una sección mexicana y otra japonesa, con la idea de acoger y ser espacio para la formación de japoneses que viven en México, sus descendientes, y para los mexicanos interesados en la cultura y la educación japonesa.

Día con día construimos una educación integral e incluyente basada en valores y enfocada en un alto desempeño académico a través de la convivencia cotidiana de las comunidades de ambas secciones desde preescolar hasta preparatoria, así como de las actividades de intercambio cultural con otras instituciones académicas internacionales.

Nuestra misión principal es formar seres humanos con una educación cimentada en los valores más significativos de la sociedad mexicana y japonesa, a través de la excelencia académica en un modelo bicultural    en personas que incorporen las virtudes de ambas naciones con la visión de formar personas que contribuyan y sean actores de cambio en la sociedad que viven para construir y un mundo más resiliente, justo, próspero y pacífico.

Consideramos importante que se conviertan en individuos plenos, preparándolos para que recorran las siguientes etapas de su vida de una manera competitiva, brindándoles herramientas tales como saber trabajar en equipo, resolver problemas por medio del sentido crítico, tener adaptabilidad, habilidades de comunicación, disciplina y organización, además del manejo de idiomas para que los estudiantes puedan ser autónomos y adaptarse con flexibilidad a los cambios en la sociedad.

El proyecto educativo del LMJ sigue un modelo en donde la disciplina y el esfuerzo constantes son mecanismos indispensables para el éxito en los distintos ámbitos en los que se desarrollan los egresados de la institución. Al egresar, los estudiantes del LMJ cuentan con elementos que les permiten no solo entender e interactuar con las sociedades mexicana y japonesa, pues en este mundo globalizado, necesitan comprenden a un conjunto de culturas diferentes a la propia, lo que a su vez, les abre la puerta a las distintas naciones del mundo. 

En el siglo XXI vivimos en un entorno intercultural y en una sociedad multicultural. Por ello, estamos convencidos de que nuestra labor de fomentar el respeto a las diferencias, culturas e idiomas es la mejor herramienta educativa para contribuir a una cultura de paz, de apoyo mutuo, de crecimiento y de prosperidad.