La Pequeña Viga - 71243 Santa Lucía del Camino

Un lugar para comer muy rico u con una atención excelente.

Muy bueno.

Buen precio

Buen servicio y productos de buena calidad, su único inconveniente que no tiene rampa para pasar al sanitario de damas.

Del sabor no me quejo pero NUNCA CONTESTAN EL TELÉFONO. Ojalá el propietario mejorara eso. Tuve buen servicio a domicilio antes, pero ahora levantan y cuelgan el teléfono.

Un lugar, no muy retirado del centro. A unos 6 mints del puente elevando de 5 srs. En vehículo. Un lugar ,amplio, cuenta con un área de mesas en el patio, el cual, permite disfrutar del clima, ya que se encuentra techado en una parte, así que es bueno, para cubriese del sol o la lluvia. Maneja una variedad no limitada, pero tampoco muy extensa de platillos. Cómo por ejemplo, los tradicionales cócteles, tostadas, filetes, pulpos. Si, bien, no está de más recalcar, que como toda marisquería, y en está época de cuarentena, pues no es posible que se puedan encontrar todos los platillos de la carta. Ya que por las bajas ventas, se limitan a comprar solo lo necesario. Ahora, los precios. Estos son razonables. Ya que por manejar platillos o más bien, productos, que no són fáciles en encontrar en buen estado, o con un buen proveedor. Los precios varían en un rango de $35 siendo la mínima , en cuanto a alimentos, a un máximo de $350 . En mi visita, mi platillo selecto, fué: un platillo de pulpos a la diabla. Al ver la presentación. En realidad, no era mala, tenía buen aspecto, una porción considerable de pulpo , acompañado por sus guarniciones. Me atrevo a decir, que los pulpos estaban ricos. Lo que si llamo mi atención. Y no me dejó , con una satisfacción. Fue el aderezo de a la diabla, que estos llevaban. Que más bien, era una consistencia caldosa, el sabor de este caldo, era exactamente, un caldo de camarón. Literal, solo retiraron los camarones, y bañaron los trozos de pulpo, con este caldo. El cual, admito ,el sabor no era malo. Era bueno, si mi platillo hubiese Sido de camarones. Pero no, eran pulpos, entonces, cambio totalmente el sabor. Pese a esta, no tan mala experiencia, por qué en verdad no fue mala. Solo ese detalle , de la cocina. Al cambiar el sabor de mi platillo, quise hacer un segundo intento, Y hago un pedido, pero con servicio a domicilio. Cóctel campechaneado: traía solo ,pulpo ,ostión y camarón. Ok. Pasa, pero , su "caldo" era tan simple que apenas y se percibía un ligero sabor a tomate. Por suerte me mandaron limones, y en mi refri , había un bote de Clamato. El cual no dude en bertirlo y mejorar el sabor. Lo cuál, si pasó. Aparte de este cóctel, pedí unos camarones empanizados. Sinceramente una porción , buena, el sabor del empanizado, bueno. Los camarones, aún se sentían algunos, un poco frescos. Pero traía una guarnición de puré de papa. Literal, no sabía a papá. Y no se sentía tan espeso como un puré. Si, recomiendo el lugar. Por qué los platillos ,no són tan malos. Las porciones no són malas, con esta situación, no hay muchos lugares abiertos. Pero sí, deberían cuidar el sabor de los platillos. Ya que uno espera comer un pulpo sabor a pulpo, no a camarón , uno espera un aderezo de mayonesa con chipotle, no un caldo espeso sabor a mayonesa, chipotle, rebajado con agua.

Me dio salmonelosis su cóctel con ostión. La verdad no lo recomiendo para nada.

El sazón de la comida es muy bueno, pero el servicio es pésimo, la mesera parece siempre estar de mal humor, si tiene mas de una mesa ni te hace caso... No tienen carta por lo que tienes que escuchar recitar el menú a la mesera, me pierdo el sazón pero por la actitud no regreso